Ante los problemas mecánicos derivados del desgaste prematuro de la correa de distribución en motores 1.2 PureTech, muchas personas jurídicas (empresas, autónomos) también se han visto afectadas. Sin embargo, cuando se trata de participar en una reclamación colectiva, es fundamental conocer si legalmente están incluidos en este tipo de procesos.
En este artículo explicamos con claridad si las empresas o profesionales pueden reclamar, en qué casos, y qué alternativas tienen.
¿Está permitida su participación en la reclamación colectiva?
No. En el caso actual, la reclamación colectiva liderada por PureTech Legal está dirigida exclusivamente a consumidores particulares, de acuerdo con la normativa vigente sobre acciones colectivas en defensa de los derechos de los consumidores y usuarios.
¿Por qué no pueden reclamar empresas ni autónomos?
La legislación española distingue claramente entre:
- Consumidores o usuarios: Personas físicas que adquieren bienes para uso privado, no profesional.
- Personas jurídicas o profesionales (autónomos): Sujetos que adquieren bienes o servicios en el marco de su actividad empresarial o comercial.
Las acciones colectivas se regulan por la Ley General para la Defensa de los Consumidores y Usuarios, y están pensadas exclusivamente para proteger a particulares frente a prácticas abusivas.
¿Qué ocurre si el vehículo está a nombre de una empresa?
Si el titular del vehículo es una persona jurídica (S.L., S.A., etc.), no podrá adherirse a esta reclamación colectiva. Lo mismo aplica si:
- El vehículo fue adquirido con fines profesionales.
- Fue amortizado contablemente o figura en el activo empresarial.
¿Y si soy autónomo?
Aunque seas una persona física, si el vehículo se vincula a tu actividad profesional, se considera uso profesional y queda fuera del ámbito de esta reclamación colectiva.
Ejemplos:
- Vehículo incluido en tus declaraciones fiscales.
- Usado como herramienta de trabajo habitual.
- Vehículo rotulado o declarado como bien afecto a la actividad.
¿Existen alternativas legales?
Sí. Aunque no puedas adherirte a esta demanda colectiva, puedes iniciar una reclamación individual. Esto requiere:
- Contratar asesoría jurídica independiente.
- Asumir los posibles costes iniciales del procedimiento.
- Evaluar viabilidad según la documentación y uso del vehículo.
Algunos bufetes, incluido PureTech Legal, pueden ofrecer valoraciones individualizadas si la empresa o profesional presenta un caso con pruebas claras de defecto de fábrica.